jueves, 23 de febrero de 2012

Estadio In-Seguro...


Ayer, 23 de Febrero hubo una reunión tripartita en el Palacio de La Moneda, Santiago de Chile. 

Siempre hay reuniones, es más, para eso está hecha la casa del gobierno de la República de Chile... Ahí es donde se deciden todas las acciones para coartar la soberanía del pueblo, de ellos mismos que los eligen.

Pero esta reunión no era una común, de esas pactadas cada 7 días. El encuentro buscaba dar los lineamientos de acción para reducir la acción de los hinchas en el estadio.

Por un lado estaban los representantes del Ministerio del Interior y "Seguridad Pública" (entre comillas una de las grandes creaciones del gobierno de Piñera, que no es más que otorgar facultades extraordinarias al mandamás del Ministerio, Rodrigo Hinzpeter. Otrora abogado de la Corporación de Fútbol Universidad de Chile durante su proceso de quiebra -el mismo que cedió los derechos de privatización del Club aún cuando los socios votaron en contra de concesionar a la institución-) en la otra punta del triangulo estaban los responsables del plan "Estadio Seguro" -iniciativa que busca implantar normas de comportamiento en la grada, reduciendo la interacción del público con el espectáculo- y finalmente los representantes de la ANFP.

Lo acordado en aquella reunión no fue mencionado en la prensa, tampoco será de conocimiento público en medio de todas las situaciones que acontecen en el contexto actual, pero merece más que un poco de atención para quienes participamos de forma activa en el espectáculo del fútbol.

Las posturas buscan como puntos más importantes: Minimizar la participación de las barras o grupos de hinchas en el espectáculo. Esto a través de la eliminación sistemática de los elementos que utilizan dentro del espectáculo mismo del fútbol; Lienzos, bombos, papeles, fuegos de artificio.
Atacar a las organizaciones buscando su desarticulación: Buscar a través de procedimientos jurídicos y policiales instancias para inculparlas de delitos; Asociación ilícita, robos, asaltos, trafico de drogas y todo lo que brinde la oportunidad de criminalizarlas.
Buscar a través de la relación entre Sociedades Anónimas y las barras organizadas el empadronamiento de sus miembros para así, crear una base de datos con quienes forman parte de estas; esta labor ha sido implementada durante años, sin conseguir ningún resultado mas que "fichar" a los barristas.
Aumentar la represión sobre los hinchas en los espectáculos deportivos. Una de las tareas más importantes para el Ministerio del Interior es aumentar la dotación policial en los partidos de fútbol. La medida busca que, a través de la mayor presencia de las fuerzas policiales sea mas fácil reprimir cualquier acto de indisciplina por parte de los hinchas en los recintos deportivos. Para esto, es necesario contar con la venia de la ANFP, organizadora de los espectáculos. La idea final es tener bajo control a una masa cautiva que puede traer mas de algún problema a los dueños del fútbol. Esta idea es la principal motivación para Hinzpeter. Controlar a quienes le dan vida al fútbol para que no se les escapen de las manos. Sabe que una barra brava enojada puede hacer bastante daño a la imagen de un espectáculo cada vez mas alicaído, que está controlado por quienes a su vez controlan el país... 

con todas estas medidas lo que buscan finalmente establecer en un espacio social tan diverso y con tanta convocatoria como el fútbol los lineamientos del estado policial de la derecha en este país. Disolver el espectáculo de las barras, la alegría de la gente y el colorido de cada jornada, que es vivida y celebrada tanto por la clase media como por la "marginal", es lo que busca esta mesa tripartita, debido que para ellos, los papeles picados, los rollos y lienzos significan una potencial amenaza a sus intereses.
La idea es vigilar y castigar, porque es mejor tener una masa controlada que un grupo de insurrectos con ansias de mostrar su descontento

En Perú el Sol no alcanza para alumbrar a todos



La situación que atraviesa el fútbol profesional en el Perú es más que preocupante. Con cuatro equipos autoexcluidos de la competición, quitando cualquier piso económico a los jugadores, funcionarios y colaboradores junto con sus familias, la cosa no se ve fácil en el futuro cercano.

Universitario de Deportes, el club más ganador de la historia en el balompie incaico sufre una crisis institucional y financiera sin precedentes en sus anales. Alianza de Lima, el club identificado con el mundo popular limeño, el equipo de Mulatos y Sambos, conocido como "grones" por sus rivales (Negros al revés) se mueven entre la Copa Libertadores y los rumores de venta a grupos inversores.
La situación particular de los dos equipos más grandes no se aleja mucho de la realidad de otras plantillas del fútbol. Sueldos impagos, cotizaciones irregulares, inexistencia de condiciones mínimas para ejercer la actividad deportiva etc.

La agremiación de futbolistas profesionales, buscando resguardar los intereses de sus miembros afectados y demostrando solidaridad hacia quienes se encuentran en problemas ha decidido ir a paro.
La respuesta de los equipos implicados fue disputar los encuentros con plantillas juveniles. Ignorando la situación de todos quienes obtienen el pan de cada día a través del fútbol.

En esta pelea de poderes, con Burga jugando un gallito frente a sus detractores en la Asociación. Con equipos retirados como la Universidad San Martín -primer equipo sociedad anónima en Perú- y otros, los principales afectados son los hinchas que, semana a semana, encuentran en el fútbol un respiro y una forma de vida y también todos quienes de una u otra manera tienen de fuente de ingresos la práctica y espectáculo del fútbol (Desde los mismos jugadores hasta los asistentes de cámara que televisan los partidos. Pasando por la señora que vende la chicha morada y el sandwish a la entrada de la cancha, el viejito de las banderas, los vendedores de helados, ceviche y canchitas. Los acomodadores de vehículos, los boleteros, el utilero, el periodista radial de provincia y las miles de personas que viven por y para el fútbol. Todos ellos sufren por las malas decisiones de unos pocos y las ansias de poder de los mismos que lucran con el sentimiento.

Esperamos la situación pronto encuentre solución. Los dirigentes paguen a sus jugadores y todos vuelvan a sentir que lo que realmente importa en todo esto es la de cuero, y quienes la mueven para darle alegría, pan y un respiro a millones de personas.

Las Malvinas son argentinas... 5x1

Una nueva jornada de Copa Libertadores nos dejó algo más que la goleada 5-1 de La U de Chile en contra de Godoy Cruz.
Angelo Henriquez sentencia el 5-1 final. A la derecha se observa el  lienzo "Las Malvinas son Argentinas"


Desde días atrás los ánimos estaban un poco caldeados. Una golpiza sufrida por el representativo chileno de hockey césped en la ciudad de Mendoza la semana pasada, propinada por hinchas de Godoy Cruz en pleno centro de la capital de Cuyo sirvió como aliciente a una histórica rivalidad, alimentada por nacionalismos exhacerbados y xenofobia recíproca entre chilenos y argentinos.
Estos hechos, sumados a la política exterior del gobierno chileno en el tema de las Islas Malvinas reavivó antiguos odios y resquemores entre ambos países, y el fútbol, como siempre, ha sido utilizado como otra arista del conflicto.

"Las Malvinas son argentinas" rezaba el lienzo colocado por la barra del "Tomba" en el Estadio Santa Laura durante el encuentro por la Copa. Más de 2.000 hinchas de Godoy Cruz cruzaron la cordillera y la consigna que cubría su espacio en el reducto de Plaza Chacabuco enviaba un mensaje que no fue reproducido por la prensa oficial del país y tampoco percibido por la gran mayoría de hinchas de la U.

La pregunta que cabe es, ¿Tiene algo que ver la reivindicación territorial de Las Malvinas con un partido de fútbol? La disyuntiva se presenta en el sentido claro que, al contrario de la opinión de los gobernantes de turno que dirigen el país, muchos hinchas de la U simpatizan con la petición legítima de soberanía sobre las islas ubicadas en el atlantico sur, pero poco tienen que ver con el partido de fútbol hoy realizado. 
El 5-1 fue una clara muestra de superioridad en la cancha de un cuadro sobre otro, no de un país sobre otro. La constante "violencia encubierta" o "guerra deportiva" bajo la cual se intenta rotular un enfrentamiento deportivo, mancha la solemnidad como también los lazos de amistad que unen a millones de personas en ambos lados de la cordillera. Pero que una vez mas se han intentado esconder bajo este conflicto. 

La violencia entre barras bravas del fútbol sudamericano existe y hace bastante tiempo. Ya sea por simpatías por el contrario, cuentas pendientes o simplemente por la esencia misma del barrismo es que siempre existe una mirada rencorosa con los visitantes. Defender los colores y el territorio es algo innato en los hombres, y sobre todo en un espacio tan machista como el barrismo. Pero intentar dar cuenta de problemáticas territoriales que se manejan entre poderosos escapan al fútbol y se enmarcan derechamente en nacionalismos chauvinistas que buscan desviar la atención de los reales problemas del pueblo. 


Apoyo la demanda válida del pueblo argentino sobre las Islas Malvinas usurpadas por el imperio britanico, pero eso no implica que el odio se apodere de un partido de fútbol. Como tampoco sirva de pretexto para entablar una relación violenta entre barras que nunca han tenido ningún tipo de conflicto ni relación. 

La vuelta es a principios de Abril y se estima que 10.000 hinchas de la U cruzarán la frontera para ver al cuadro azul contra el Tomba, que, paradojicamente se jugará en el Estadio Malvinas Argentinas... 

sábado, 11 de febrero de 2012

La disyuntiva está en la mesa. ¿Apoyar o no a quienes se manifiestan en contra la concesionaria?

Arturo Sanhueza busca protegerse a metros del segundo artificio.

Lo sucedido ayer en el Estadio Santa Laura se enmarca dentro de un espacio de protesta, en el cual, una facción de la Barra Los de Abajo decidió suspender el partido de una forma muy particular. Tirando fuegos artificiales al campo de juego.

El juez del partido, Patricio Polic indicando el fin del encuentro.
Eugenio Mena y Pedro Morales (Der) intentando protegerse del artificio. 
Lo primero es el hecho: Todos vimos lo que sucedió en la cancha, como explotaron los paquetes. De forma espectacular las metrallas del artificio saltaron por todo el campo de juego, afectando a los jugadores de ambas escuadras -por más que un comentarista de la señal oficial de la ANFP intentara poner como blanco a los jugadores de Iquique- poniendo en riesgo su integridad física y dejando obsoleta cualquier garantía de seguridad para continuar el espectáculo.

Segundo. La forma: Si bien creo que no existe por parte de quienes aborrecemos el fútbol negocio, ningún tipo de cuestionamiento al iniciar en contra de las empresas que manejan a nuestros equipos cualquier tipo de acción directa, creo a titulo personal, que no es la forma de realizar la protesta. 
Si bien se consiguió plenamente el objetivo de dar notoriedad al movimiento como también el de suspender el partido -que tiene una lógica bastante cuerda y bien fundada-, no es posible que se ponga en riesgo de manera innecesaria la integridad de los jugadores de fútbol, como sucedió ayer. La gravedad de los actos no pasa por el hecho del fuego artificial, si no que por el elemento en cuestión -el tipo de fuego lanzado a la cancha-. 
El portero de Iquique, Cristian Limenza, intenta tapar sus oídos frente al fuego artificial.
Esta fue la primera detonación.
Las metrallas del artificio pasaron muy cerca de jugadores de ambos equipos, tanto Iquiqueños como Chunchos. Se rompió con la sacralidad de la cancha. La cancha no se toca, ese es un código conocido por todos los amantes del fútbol en el globo. 






Tercero:  Las causas de este suceso ya han sido esbozadas en este blog (http://www.futbolismos.blogspot.com/2012/02/somos-la-mas-brava.html), pero existe aún más detras de este espacio de protesta. Quienes llevan los alegatos y realizaron los actos de ayer en Santa Laura se adscriben a una facción en especifico de la barra. "Movimiento LDA por una hinchada mejor". Bajo este nombre, ellos dieron el golpe de timón en Los De Abajo a principios de 2011, argumentando que este cambio buscaría una real autonomía de LDA con Azul Azul, situación que no se dio entre quienes manejaban la barra anteriormente. 
Si bien se comparte de manera clara parte del petitorio público con el que han dado fundamento a las acciones realizadas en los últimos tres partidos de este año -bajar el precio de galería y reponer los beneficios eliminados para quienes menos tienen- existen razones desconocidas y poco claras que se atribuyen a este movimiento, las cuales dan para pensar. Estas razones se basan en el conocido quiebre en la relación de Movimiento LDA con Azul Azul. La concesionaria, al tener conocimiento del quiebre en la barra, repartió los beneficios -entradas, viatico en viajes etc.- entre las dos facciones, -"Movimiento" y "Núcleo"- creando así una lucha por el control total de las regalías. Al perder estos "beneficios" la facción "afectada" decidió boicotear cada partido en que participara el equipo de la U con una finalidad clara. 

Cuarto: El Efecto: Sentar precedente sobre la capacidad de acción de este bando y buscar la suspensión de la localía de la U con la finalidad de que Azul Azul no pudiera llevar público a sus partidos.
Esto se traduce en la pérdida del borderó, afectando directamente las finanzas de la concesionaria y así, con esta medida de presión, el directorio de Azul Azul ceda a las peticiones del "Movimiento"

Con cada uno de los elementos de esta acción claros, es mas fácil emitir juicios sobre el hecho y sus justificaciones. La bengala marcó un precedente. En un periodo especialmente frágil, bajo el cual desde la autoridad se intenta quitar cualquier valor y apoyo a los movimientos de protesta, criminalizando sus peticiones y actos, la bengala en cuestión lo que ha hecho es encender una mecha. Le ha brindado un elemento tangible a quienes justifican la acción política y policial en contra de los movimientos de protesta, ha afectado cualquier apoyo entre la masa azul al movimiento y brinda un elemento irrebatible a los aparatos represivos para actuar de manera fundada contra las barras de todo el país, porque así como LDA tiró una bengala que expuso a jugadores y aficionados, cualquier barra podrá hacerlo, dirán ellos. 

Sea como fuere, la situación de ayer marcó un precedente tanto en la lucha en contra del fútbol negocio, como también la labor y acción del barrismo en Chile. La criminalización del "ser barrista" se viene con todo.

Ahora, la pregunta busca un respuesta. ¿Apoyamos o no las manifestaciones en contra de Azul Azul?.
Mi respuesta es clara. Sí, apoyo el fondo, pero jamás la forma.


martes, 7 de febrero de 2012

Varsovia vs Dínamo.

Si les digo que ayer el Varsovia se coronó campeón frente al Dínamo se imaginarán un duro enfrentamiento en el invierno europeo, con bengalas, nieve, pelota naranja y cánticos duros. La verdad es que esta final se jugó en la ciudad más árida del mundo, donde la única nieve que existe viene en polvo y los sobres dicen “made in China”. Tampoco fue en Europa, si no que en Chile, y exactamente en la puerta norte del país.

Arica recibió el Interregional Copa de Campeones Norte, torneo en el cual los mejores equipos de la segunda categoría del amateurismo se enfrentaron para dirimir cual era el mejor de todos y en la final se enfrentaron El Juventud Varsovia de Lo Espejo (Santiago) y el Dínamo de Quillota.


El partido finalizó 2-2 en el tiempo reglamentario. Con gol de Pineda, a los 41’ del segundo tiempo, el Dínamo logró empatar el partido y llevarlo a alargue. Ya en los 30 suplementarios los quillotanos tomaron ventaja con gol de Berríos comenzada la segunda etapa del alargue. Cuando el Dínamo se preparaba para levantar la copa, Sotomayor logró el empate milagroso a los 29’ y sentenció los penales.

En definitiva la tanda de penales finalizó 5-4 a favor de los oriundos de “La Caro” y significó el primer gran titulo para “los polacos” en su historia, quienes no daban crédito a su triunfo.

La Historia del Juventud Varsovia es bastante particular. Saltó a la fama durante el 2010, cuando enfrentó por la Copa Chile a Audax Italiano, y si bien, los 18 goles en contra y ninguno a favor sentenciaron su eliminación del torneo (0-5 en la ida 13-0 en la vuelta) quedó en la retina de los futboleros este nombre.

El Juventud Varsovia proviene de la población (conjunto habitacional popular) Cardenal José María Caro, la más grande de Chile y con mayor densidad poblacional. Con una rica historia obrera y emblemático bastión de las tomas de terreno entre las décadas del 1950 y 1960, la “Caro”, como es conocida normalmente, es habitada por alrededor de 80 mil personas, principalmente obreros y empleados de clase media baja y baja, gente de esfuerzo que ve opacados sus logros debido a la crónica roja, que centra su atención en el narcotráfico. En medio del estigma de ladrones y traficantes, el “Varsovia” se alza como un ícono de esta población.


Lato, el embajador del Varsovia.
El 2002 Grzegorz Lato, goleador del mundial Alemania 1974, campeón olímpico en 1972 y plata en el 76 visitó Chile como representante del parlamento polaco, el diputado por la alianza izquierda buscó en Santiago un lugar que le recordara a su tierra y encontró la sede del Varsovia. Se mostró orgulloso que un club llevara el nombre de la ciudad capital, contó historias, dejó una bandera y dinero.  El nombre le trajo al club beneficios como la visita de Lato, pero también causó problemas antaño, “En los setenta, llegaron unos militares a decirnos que cambiáramos el nombre del equipo, porque era una ciudad comunista”.[1]
Luego de 51 años de historia, los polacos disputarán su primera final nacional contra Quesos Kumey, otro equipo que se lanzó a la fama gracias a la Copa Chile. 
No será otro clásico de Europa del este, pero de seguro no faltarán los cánticos y el apoyo de toda la “Caro” para conseguir la copa.



[1] El día que Grzegorz Lato estuvo en la población José María Caro. Las últimas noticias, 17 de mayo de 2011. Santiago.

lunes, 6 de febrero de 2012

Somos la más brava!

Minuto 15’ del segundo tiempo –o 60 para los más modernos- atacaba la U por derecha cuando Osses  para por segunda vez el partido. La cámara del CDF –Canal del Fútbol. Señal privada perteneciente a la ANFP que transmite a través de televisión prepago los partidos del fútbol chileno- lo pone en primer plano, con 3 trozos de cemento en la mano y gesticulando con rabia ante un carabinero. ¡Lo termino, si no paran lo termino!

Es el tercer partido que juega la Universidad de Chile con público este 2012, pero el primero aún se está jugando en las galerías.
La “Noche Azul”, espectáculo organizado por la empresa Pegaso y  que surgió como la respuesta azul a la rimbombante “Noche Alba” de antaño, tuvo más que la presentación de los refuerzos modelo 2012 de la U. La verdadera acción no estuvo en el 1-1 frente a Nacional de Uruguay, estuvo en la galería y las puertas de salida.
Carabineros, la fuerza pública encargada de la seguridad en los espectáculos deportivos, negó sistemáticamente el ingreso de los implementos característicos de la hinchada Los de Abajo. Tanto sus bombos como el fuego de artificio –su uso está prohibido por ley en el país, pero es aceptado implícitamente por carabineros para su uso por barras bravas- que pretendía utilizar la barra para celebrar la presentación del equipo fueron dejados fuera del estadio y requisados por la fuerza pública. Terminado el cotejo, se armó el tropel en las inmediaciones del nacional. La policía atacó indiscriminadamente a hinchas y espectadores desatando la furia de la barra, quien respondió el ataque con fuerza. Varios hinchas heridos y otros tantos detenidos además de un bombo requisado fue el saldo de esa noche. Lo que más molestó a la organización de la barra fue que Azul Azul, la concesionaria a cargo del equipo, no se hiciera parte de la petición de entrar los implementos, dejando cualquier intervención posible de lado.

La declaración de guerra por parte de LDA no se hizo esperar. Sumado al incidente con carabineros en la noche azul, la eliminación del beneficio socio-galería –una tarjeta con un costo aproximado de $10.000 para estudiantes y $15.000 público general con la cual todo quien la posea tiene el derecho a comprar entradas con un 50% de descuento aproximadamente- y los altos precios de las entradas los hinchas sienten que quienes llevan al equipo no los respetan, representan ni comprenden, aún cuando los hechos oculten un conflicto más grande.

Los hinchas de LDA, agrupados a través del Movimiento LDA –grupo disidente que tomó el control de la barra a principios del 2011 y que se divide las simpatías de hinchas con el denominado “Núcleo” quienes eran los antiguos jefes de la barra- , han hecho saber a través de las redes sociales su descontento con Azul Azul y prometieron que los hechos no se olvidarán fácilmente. Desafiando de manera directa a la concesionaria y dando muestras de su capacidad de control sobre el espectáculo, el movimiento intervino directamente en el partido que la U jugó contra Colo-Colo en Temuco, en el marco de un torneo amistoso. En este partido, la barra lanzó en reiteradas ocasiones bengalas hacía el arco del portero rival. Ante el llamado de atención por parte del árbitro y la posterior intervención del capitán Johnny Herrera, LDA volvió a lanzar los artificios al césped del campo de juego, cuando la U buscaba impetuosamente el empate. El partido se suspendió por falta de garantías. La U perdió 2-1 en la cancha, pero el “movimiento” ganó en la galería, consiguiendo su objetivo.

El segundo capitulo se vivió en La Serena. Las piedras y proyectiles no vienen por parte de los “desalmados de siempre”, si no que tienen un objetivo claro. Más que piedras y pedazos de concreto son signos de que algo no anda bien, de un tira y afloja entre la barra, quien busca hacer respetar su territorio –y también sus intereses económicos- y la concesionaria, la cual busca no ceder a las presiones de los barristas y se encuentra en la palestra debido a la constante crítica pública que se les realiza constantemente por su labor en los hechos de violencia que envuelven al fútbol.


Pero si bien, la bomba estalló en “la noche azul”, los verdaderos motivos de este “gallito” entre barra y dirigencia tienen otros motivos, mucho más profundos.
La separación de LDA tras el golpe dado por el “movimiento” al  “núcleo” no solo significó controlar la 14 –mítica puerta donde LDA se hace en el Estadio Nacional- si no que también manejar todo lo que implica ser jefe de la barra, es decir poder y dinero.
Azul Azul, al igual que todas las sociedades anónimas que controlan el fútbol profesional en Chile, tiene acuerdos tácitos con las barras. Financian viajes a regiones y el extranjero, entregan una cantidad fija de entradas a los barristas en cada partido y tienen una relación de trabajo, la cual busca controlar a una masa cautiva cercana a las 5.000 personas. Con la división de la barra, también se dividieron estos beneficios.
El “movimiento” busca la exclusividad de estos beneficios, pero el “núcleo” tiene una relación mucho más profunda con la concesionaria, y es que llevaban más de 10 años controlando sin contrapeso a LDA, por lo tanto a través de la violencia, el “movimiento” busca dar muestras de que ellos son quienes controlan las cosas ahora.

Otro factor que se suma a esta puja es la ley “estadio seguro”, impulsada por el Ministerio del Interior y Seguridad Pública. Esta ley busca aumentar las penas y sanciones a quienes cometan hechos de violencia en recintos deportivos, como también fortalecer los controles para que los barra brava tengan menos control sobre el espectáculo y así se reduzcan los niveles de violencia, robo, trafico de drogas, porte ilegal de armas y asociaciones ilícitas que se dan en el marco de un partido de fútbol.
En el marco de las reformas impulsadas por “estadio seguro” se han alzado voces de parlamentarios, quienes buscan un mayor control y participación por parte de los dueños de los clubes en los hechos de violencia en que se ven envueltas las barras bravas y es en este punto donde LDA ha encontrado un espacio donde atacar. Al demostrar su descontento a través de la violencia, con el ataque directo y sistemático del mismo espectáculo deportivo, lo que hace LDA es enviar un mensaje claro. Si no nos dejan tranquilos, nosotros no los dejamos hacer su espectáculo.
Los dueños de la U saben que no es una buena imagen para ellos mostrar en televisión a un grupo de forofos incontrolables y dispuestos a todo, más aún cuando estas escaramuzas pueden aumentar la validez de quienes buscar controlar a las barras haciendo responsables a quienes comandan los clubes. Por lo tanto, esta situación entre ceder a la barra para no suspender los partidos o dejar actuar a la fuerza pública para dar una señal de control a la sociedad no es de lo más incómoda para quienes adquirieron a la U, pero ya es hora que comprendan que no todo son beneficios. Que ser dueño de un equipo de fútbol como la U tiene sus ventajas pero también acarrea responsabilidades, esas mismas de las que Federico Valdés intenta desmarcarse.

Veremos el próximo viernes si Azul Azul cumple con su responsabilidad en el espectáculo o simplemente se enmarca en la constante mediocridad y cobardía en la que se ha movido la dirigencia del fútbol profesional chileno desde siempre, escondiendo sus responsabilidades tras los mismos que les mantienen el negocio.

miércoles, 1 de febrero de 2012

Entre cholos, negros, indios y macacos


Ayer, 31 de Enero de 2012 se jugó una nueva edición del superclásico chileno.
Universidad de Chile enfrentó a Colo-Colo en el estadio Bicentenario Germán Becker, ubicado en Temuco, a 675 kilómetros al sur de Santiago. El partido amistoso, válido por la ya tradicional “Copa Gato” fue suspendido antes del pitazo final por una bengala tirada por la barra Los de Abajo al campo de juego.
Si bien todos los análisis realizados por la prensa deportiva ahondaron en la acción de los “desalmados” y “delincuentes” barristas, algo pasó desapercibido.
Promediando el primer tiempo, Junior Fernandes, delantero afrodescendiente de padres brasileños, nacido en Tocopilla –El mismo pueblo de Alexis Sanchez- y contratado este año por Azul Azul para formar parte de la U, tomó posición en el area colocolina esperando el envío de Pedro Morales desde la esquina.
Tras un centro bombeado el albo, el arquero de Colo-Colo - Equipo que lleva el nombre del mapuche que firmó el primer tratado de paz con los españoles, representados por el colonizador García Hurtado de Mendoza y que además en su insignia lleva la imagen de otro mapuche, Lautaro- Francisco Prieto saltó por el balón y al mismo tiempo lo hizo Fernandes, chocando en el aire contra el portero. Inmediatamente Prieto saltó sobre Junior y lo empujo, gritando “Más cuidado po negro culiao”.
El árbitro, a menos de dos metros se desentendió de la jugada y todo continuó normal.
Parece que “negro culiao” es más que normal en una cancha chilena.
Este hecho, que no tiene sanción alguna en los estatutos, reglas y bases de la ANFP, se contrapone directamente con lo sucedido en Inglaterra con Luis Suárez, jugador uruguayo sancionado con ocho partidos oficiales por referirse de la misma forma hacia Patrice Evra, volante del Manchester United. ¿Son personas diferentes?, no, ambas son iguales. La diferencia radica en que la UEFA y sus federaciones asociadas llevan años luz atacando los problemas de discriminación acontecidos en sus estadios, sancionando  deportiva y económicamente a quienes cometan una falta que tiene nombre y apellido, racismo.

Por ejemplo, en Colombia cada vez que un jugador afrodescendiente toma el balón miles de personas comienzan a hacer sonidos guturales imitando a un simio. Le gritan “simio hijueputa” “macaco” y otros ataques simplemente por su color de piel. Lo más contraproducente y cómico por decir lo menos, es que los mismos hinchas afrodescendientes del equipo contrario gritan al mismo ritmo que sus pares.

En Perú también de la misma forma se ataca a los jugadores afrodescendientes. No es el “negro” con el cariño que uno llama a sus amigos morenos o afrodescendientes, tiene una connotación negativa y un significado a todas luces denigrante. El “negro” carga con la culpa de su color de piel, reproduciendo los discursos del colonialismo que todos nuestros antepasados sufrieron y nuestros pares siguen sufriendo en el viejo continente. Aún cuando el país incaica tenga mas de 3/4 de población indígena.

Para nosotros, los sudamericanos, es normal atacar a quienes percibimos como distintos a nosotros por su color de piel –sin mirar nuestra tez entre negra y blanca al espejo- o sus rasgos característicos. El “cholo maricón”, “indio de mierda”, “negro culiao” o “macaco hijueputa” no es problema, o mas bien creemos que no es problema, pero la realidad indica que esta “normalidad” del ataque a las personas por sus rasgos físicos se ha ido convirtiendo en un ataque a la dignidad y nos da un combo en la cara de nuestra ambigüedad cultural. Cuando un moreno grita “negro culiao” olvida su tez de piel, pero si un blanco le grita “indio de mierda” hace valer todas las instancias posibles debido al ataque directo que recibe.

La pregunta nace frente a la cada vez mayor presencia de afrodescendientes en espacios más visibles, es decir en lugares de gran importancia en nuestra sociedad, ¿Es necesario comenzar a legislar dentro del mundo del fútbol el tema del racismo y la discriminación por origen étnico? O ¿simplemente es otra arista del espectáculo del fútbol y debemos comprenderla como natural? La respuesta creo es clara, si no se ha hecho antes es tiempo de ponerse los pantalones y enfrentar el problema como lo que es, racismo puro y duro.

Dejemos de ser ambiguos, colguemos la incongruencia y despertemos finalmente de la larga noche de los 500 años en los cuales toda nuestra gente sufrió lo mismo que reproducimos.
Es necesario comenzar a crear una conciencia activa de que estamos en el terruño más mestizo del mundo, el crisol de colores de nuestra gente es digno de orgullo, no de ataques constantes a nuestros pares, porque un poco mas negro o blanco no hace la diferencia, la diferencia en el fútbol la hace el talento y ese es mas oscuro que albo, si no, Cubillas, Pelé, Eusebio, Maradona, Figueroa, Salas y la gran cantidad de nuestros bastiones del buen pie simplemente serian los indios, negros o cholos culpaos.

En un partido de negros y mestizos contra blancos ya sabemos quien gana, y por goleada. 

Llegó el fútbol negocio, el verdadero fútbol negocio.


Cuando René Orozco, Nefrólogo y docente de la Universidad de Chile y además presidente de la CORFUCH[1] durante la década del 90 y 2000, profetizó que el fútbol caería en manos de la derecha política y los grupos económicos influyentes del país no se equivoco. Es más, acertó con una escalofriante precisión.

El fútbol profesional chileno, o más bien fútbol rentado[2]  sufrió un cambio sustancial durante la década del 2000, periodo en el cual, y debido al proyecto aprobado por el poder legislativo en Chile, se le obligó a la totalidad de los clubes de fútbol a ser privatizados. Las opciones eran dos, la primera y a la cual la totalidad de los equipos adscribieron, fue la de crear una Sociedad Anónima con fines de lucro. La segunda, crear un fondo de inversiones bajo el nombre de fundación o corporación, pero con una pequeña salvedad. Quienes dirigieran esas fundaciones o corporaciones debían responder penalmente en caso de problemas económicos. Nadie fue tan valiente, o más bien a nadie dejaron ser tan valiente para tomar este camino.
Los equipos profesionales -o más bien rentados[3]- junto a la ANFP, abrazaron con entusiasmo al fútbol negocio. Ahora podían ser dueños en el papel y la testera, algo implícito pero por todos conocido hasta entonces.
No tardaron en abrazarse, vaticinando una nueva etapa para nuestro fútbol. Prometieron responsabilidades, espectáculo a gran nivel y sobre todo el fin de la violencia. Ya no más quiebras ni fraudes, tampoco más vándalos ni malos equipos, todo era lindo y perfecto.

La aprobación por parte del congreso de la Ley 20.019, en Mayo de 2005, buscaba “ordenar el funcionamiento de los clubes deportivos y sus manejos financieros”[4]. La propuesta databa de 2002, cuando el Presidente de la República, Ricardo Lagos, envió el proyecto de ley al congreso, mencionando dentro de sus gestores a un por entonces ex senador, de apellido Piñera y nombre Sebastián.
La relación del actual Presidente de la República con las S.A.D.P es bastante conocida[5]. Aprobada en 2005, esta ley entregó en bandeja a los clubes deportivos y equipos de fútbol a quienes contaran con la capacidad de comprarlos a un precio bastante asequible para sus bolsillos. El fútbol perdía así cualquier carácter social y sería arrebatado a sus verdaderos dueños, los hinchas y socios.

La realidad apunta a que la primera Sociedad Anónima Deportiva Privada – gran nombre para designar a las S.A- en el fútbol chileno adquirió el mítico y académico equipo de Magallanes cerca del año 2000. El primer campeón del fútbol profesional en este país realizó paupérrimas campañas en primera B desde que se privatizó y finalmente descendió el año 2006. Demoró 5 años en volver al fútbol profesional. Durante el 2011, en su retorno al profesionalismo, Magallanes quedo penúltimo en la tabla general, superando solamente a Copiapó, equipo descendido al amateurismo. Magallanes fue la primera S.A de la nueva época, pero no es modelo, ejemplo ni símbolo de las S.A.

Tampoco muchos recordarán a la más nefasta de todas las incursiones del fútbol negocio en esta media década. León de Collao. Con bombos y platillos un grupo inversor europeo tomaba control de Deportes Concepción S.A.D.P, los lilas junto a Fernández Vial son el equipo más masivo del Gran Concepción y prometían mucho.
La realidad indica que dejaron sueldos impagos, contratos desechos, relaciones comerciales a medias y lo peor, a un equipo profesional sin jugar.
Uno de sus directores, Marcos Ulloa, está recluido en una cárcel de la zona por delitos como estafa y malversación de fondos[6], pero no por lo hecho con León de Collao, si no que por otros motivos – ¿puede ser peor? Sí, puede ser peor-.
La concesión de derechos se realizó por 30 años, en los cuales Deportes Concepción S.A.D.P cedía a cambio de 650 millones de pesos[7] el control del equipo. El 27 de Agosto de 2007 se firmó el acuerdo, y menos de un año después se deshizo en una notaría de Concepción. El trámite costó 40 mil pesos, pero dejó perjuicios sociales, económicos y deportivos difíciles de estimar.
Durante el Apertura 2008 Deportes Concepción realizó una meritoria campaña en el torneo, la cual lo dejó en puestos de avanzada finalizada la competición, pero por las constantes fallas administrativas, episodios vergonzosos de cheques sin fondo, planillas impagas y conflictos económicos, el equipo, a través de la ANFP, fue castigado con la peor de las penas del fútbol, no poder competir.
Durante el clausura 2008 el fútbol chileno contó con 19 equipos, Deportes Concepción fue castigado con la expulsión del torneo y se decretó el descenso automático a Primera B. El primer gran revés de esta etapa[8] del fútbol moderno en el Chile. El modelo era bueno, pero solo en algunas ocasiones y, el “Conce”, sufrió en carne propia la otra cara de la privatización.

Cuando se aprobó la ley de Sociedades Anónimas Deportivas no tardaron en aparecer las ‘necesidades’ de modernizar y sanear clubes. Los dos equipos más grandes del país, Universidad de Chile y Colo-Colo, no tardaron en ser privatizados y repitiendo la antigua puja que data desde la dictadura. Las palabras de Orozco dieron en la certeza más exacta. La ‘U’ fue adquirida y controlada por la UDI y Colo-Colo por RN, al igual que en la dictadura, cuando los azules a través de Rolando Molina, fueron controlados por la Avanzada Nacional –derecha extrema y conservadora- y los albos cayeron en manos de los liberales económicos –grupo BHC- .

Colo-Colo cayó en la quiebra el año 2002. El club perdió gran parte de su patrimonio intentando saldar una deuda cercana a los 30 millones de dólares.
El año 2005 se decide ceder los derechos del CSD Colo-Colo a la concesionaria Blanco y Negro S.A por 30 años. Blanco y Negro, bastión de las S.A.D.P. consiguió en sus primeros tres años de concesión dominar completamente el campeonato nacional, amarrando 5 títulos nacionales, un equipo plagado de estrellas y reconocido en todo el continente. Colo-Colo demostraba con copas y triunfos que las S.A eran lo mejor que le podía pasar al fútbol chileno. Luego de esa pequeña etapa dorada, la concesionaria desmanteló completamente el equipo, usufructuando el legado dejado por el club. Jugadores como Matías Fernández, Valdivia, Fierro, Ormeño y Bravo, todos formados bajo el alero del antiguo CSD, fueron vendidos por ByN. Posterior a esta etapa el equipo ha transitado entre éxitos como el campeonato clausura 2009 y fracasos estrepitosos como quedar fuera de play-off el mismo 2009 o no conseguir superar la fase de grupos de Copa Libertadores desde hace 5 años.

Universidad de Chile al igual que su rival también cayó en desgracia. El 26 de Mayo de 2006 la cuarta sala de la corte de apelaciones de Santiago rechazó la petición realizada por la CORFUCH para levantar la quiebra de la corporación, decretada el año 2002. Por primera vez en su historia el estado de Chile decretaba la quiebra de una institución sin fines de lucro por deudas con el fisco.
La deuda con el fisco ascendía a  $5.700 millones de pesos y el club sería manejado por el síndico de quiebras José Manuel Edwards durante todo el proceso previo a la licitación.
364 días después Azul Azul se adjudicaría la concesión del club por 30 años, prorrogables a 15 en caso de cancelar la deuda tributaria del club antes de un periodo.
El mandato de Federico Valdés a cargo de la concesionaria ha tenido de dulce y agras.
En menos de 5 años consiguió el primer titulo internacional para los azules y cuatro campeonatos nacionales, finalizó la construcción del centro deportivo azul en la comuna de La Cisterna pero también enfrentó diversas problemáticas con la hinchada, debido al alza de precios en las entradas –Azul Azul llegó a cobrar 15 mil pesos por una galería para la semifinal de Copa Sudamericana el 2011-, constantes cambios de localía –durante 2009 jugó en 5 reductos distintos de local, incluyendo Coquimbo y Viña del Mar-, y graves incumplimientos en los contratos con socios abonados[9]
Luego del periodo de ByN, Azul Azul ha tomado la batuta, y se convierte en el modelo de S.A para el resto de los equipos del país.

Pero Azul Azul es solo el triunfador dentro de un universo de 30 S.A.D.P (U. de Concepción y Huachipato no son S.A.D.P.) que poco y nada han cambiado desde la implementación de la ley 20.019. No ha aumentado la competitividad ni ha mejorado la competencia nacional. Es más, ni siquiera se ha acercado a la época dorada del fútbol chileno, que durante 1969 y 1982 ofreció su mejor espectáculo y rendimiento en copas continentales –Universidad de Chile, Colo-Colo, Cobreloa, Unión Española, O’Higgins, Palestino y Universidad Católica disputaron, al menos semifinales de Copa Libertadores-.

Casos como Unión San Felipe o Rangers de Talca[10] han mostrado la otra cara del fútbol negocio, ensuciando la actividad y poniendo bajo la lupa a estas empresas deportivas, cuestionando su real interés por la competencia deportiva más que por el dinero y afectando directamente a quienes sustentan el negocio, los hinchas.

Las S.A.D.P no son la panacea del fútbol, tampoco la solución definitiva a la violencia, y a los constantes fracasos deportivos a nivel internacional. Si bien prometieron mejorar la competencia y el espectáculo con su llegada, lo que realmente hemos visto en los casi 7 años de vigencia es que no han realizado cambio alguno en el fútbol nacional. Debemos comprender la llegada de las sociedades anónimas como la privatización de la competencia y espectáculo deportivo en Chile, que obedece a las reglas del mercado y al sistema económico al que optó –o más bien fue impuesto- el país, no como lo que intentan mostrar los medios de comunicación a la opinión pública, la profesionalización del fútbol no es tal, debido a que quienes han adquirido el fútbol no buscan mejorar la competencia –con el caso Bielsa queda bastante claro-, si no que solo intentan hacer crecer fortunas personales y satisfacer su ego a través de algo que nos pertenece a todos, nuestro querido equipo de fútbol, el de toda la vida.

La pérdida de participación de la sociedad civil en un ámbito tan propio e importante como el fútbol, el cual crea identidades, relaciones sociales, imaginarios comunes y colectivos, tanto locales como nacionales, que cada fin de semana reúne a millones de personas con solo una pelota en común, no puede ser tomado a la ligera ni interpretado de maneras burdas ni simplistas. Es necesario comprender lo que sucede con un aspecto cultural y social arraigado en nuestra identidad. Es por esto que hay que dejar en claro que el fútbol negocio llego para quedarse y nosotros, los hinchas, tenemos la obligación de encontrar una vía para demostrar nuestro descontento, necesidades y propuestas con el fin mejorar algo que siempre nos ha pertenecido. Como dijo Orozco, finalmente la derecha se ha adquirido lo último que nos quedaba, nuestra camiseta, aún cuando sabemos que somos nosotros quienes les mantenemos con nuestro amor incondicional su fútbol negocio.



[1] Corporación de Fútbol de la Universidad de Chile. Organismo autónomo creado en 1978 tras la incisión de la casa de estudios con la rama de fútbol del Club Deportivo Universidad de Chile. Hecho consumado durante le mandato de Rolando Molina,  Abogado y militante de “Avanzada Nacional”, grupo de ultraderecha influyente y participe activo de la dictadura militar comandada por Augusto Pinochet Ugarte.
[2] En Alusión a Edgardo Marín, quien con bastante certeza y conocimiento de la actividad debido a su labor como profesional y estudioso del fútbol en Chile ha determinado que la práctica deportiva ligada al fútbol en el país no se puede definir como profesional –en contraposición a amateur- si no que debe ser definida como rentada, ya que la gran diferencia con el amateurismo es que el fútbol rentado paga a quienes ejercen la actividad pero mantiene las arcaicas estructuras que sustentan a la práctica, espectáculo y dirigencia del fútbol. No existe una profesionalización de instituciones ni tampoco de quienes las dirigen.
[3] se comprende como todos los equipos o clubes de fútbol que sean socios de la Asociación de Fútbol Profesional ANFP, y compitan en sus torneos, ya sea de primera división o primera división B.
En total son 32 equipos socios, quienes entre otros negocios, poseen el control de la competencia, los derechos de televisión y difusión del fútbol profesional chileno. Están asociados a la CONMEBOL y a la FIFA a través de la Federación de Fútbol de Chile, organismo en el cual comparten protagonismo con la Asociación de Fútbol Amateur, ANFA. Todo este entuerto burocrático se reduce a que la selección de Fútbol de Chile, cuando participa en eliminatorias, sudamericanos y mundiales de fútbol en todas sus categorías lo hace bajo el nombre de la F.F.Ch, no en nombre de la ANFP, aún cuando normalmente quien va a las reuniones de CONMEBOL y FIFA sea el presidente de esta organización.

[4] Disponible en la World Wide Web de la Biblioteca del Congreso Nacional de Chile. http://www.bcn.cl/actualidad_legislativa/temas_portada.2005-11-02.6038105622. Consultada el 26 de enero de 2012 a las 3:39 A.M.
[5] Sebastián Piñera, Presidente de la República durante el periodo 2010-2014 fue desde la creación de Blanco y Negro S.A.D.P. hasta el año 2011, controlador mayoritario de la concesionaria controladora de Colo-Colo.
[6]Disponible en la World Wide Web http://latercera.com/noticia/deportes/2011/08/656-385981-9-formalizan-por-estafa-a-ex-director-de-leon-de-collao-sa.shtml. Consultado el 26 de enero de 2012 a las 0:20 AM.
[7] Si bien la concesión fue avaluada alrededor de los 1.000 millones de pesos, divididos en 650 millones para D. Concepción y 350 para inversión en infraestructura, la realidad indica que solo 650 millones de pesos fueron entregados a la Sociedad Anónima. Así consta en la escritura firmada ante notario el 13 de Junio de 2008,  fecha en la cual León de Collao devuelve la concesión a 30 años a D. Concepción.
[8] La ley de Sociedades Anónimas Deportivas Privadas no es el primer intento de privatización del fútbol chileno en su historia. El caso de Colo-Colo con el grupo de inversión BHC se erige como el primer intento de privatizar el fútbol, mas adelante, en el desarrollo de este artículo se presentará la situación de Colo-Colo y su privatización.
[9] Durante la Copa Sudamericana 2011 las entradas destinadas a los socios fueron vendidas a quienes no lo eran, dejando a estos sin la posibilidad de disfrutar de un beneficio pagado. También durante 2008 y 2009 los abonados sufrieron perjuicios económicos debido al cambio de localía de la U. Por esto y otras razones, las oficinas de Azul Azul, ubicadas en la calle Marchant Pereira, comuna de Providencia, sufrieron un ataque a finales del año 2009. Información disponible en la World Wide Web http://www.terra.cl/deportes/index.cfm?accion=futbolnacional&id_reg=1331229  Consultada el 1 de febrero de 2012 a las 3:31 AM
[10] Unión San Felipe se ha convertido en un equipo al servicio de la triangulación de jugadores. Este acto, si bien no infringe ninguna normativa FIFA, no es bien visto en el mundo del fútbol –la triangulación implica pagar menos por un determinado jugador y venderlo a través del club chileno a un precio mucho mayor, lo que se traduce en menor pago de comisiones, impuestos y gravámenes propios de estas transacciones, debido a que clubes como el mismo U. San Felipe compran pases de jugadores estrella pero nunca recalan en Aconcagua.Casos como el de Ignacio Piatti, comprado por U. San Felipe e inmediatamente traspasado a San Lorenzo de Almagro en Argentina o Victor Meza, delantero Argentino que siguió el mismo camino que Piatti son los que ponen bajo la lupa el gerenciamiento del club aconcagüino. Ninguno de los jugadores pisó suelo chileno. Finalmente las sospechas sobre Rangers recaen debido a que el grupo inversor que controla U. San Felipe es quien adquirió al cuadro talquino.
Juan Pablo Varsky, “Un matrimonio por conveniencia”, Diario La Nación, Buenos Aires, Argentina. 31 de Mayo de 2010.